24 de diciembre de 2008

Abre tus brazos al mundo...

Leyendo el blog de mi amiga Fire descubrí la canción "Do They Know It's Christmas", su letra me hizo reflexionar.
Ya es Navidad, por lo menos para los afortunados como nosotros. Pero lamentablemente no lo es para todo el mundo.
Deseo que en estas fechas todos nos acordemos también de los que no tienen nada y demos las gracias por todo lo que nosotros tenemos.


He suprimido algunas imágenes realmente fuertes. Si estas son las lights imaginaros como eran las otras.
Dale al Play para escuchar la canción, y lee el post, que es la traducción de la canción.


Es época de Navidad,
no hay necesidad de tener miedo.
En navidad…
dejamos entrar la luz y desterramos las sombras.

Y en nuestro mundo de abundancia,
podemos desplegar una sonrisa de alegría.
Abre tus brazos al mundo…
en época de Navidad.



Pero di una plegaría,
ora por los demás.
En época de Navidad,
es duro, pero cuando tú estás pasándolo tan bien,
hay un mundo tras tu ventana,
y es un mundo de grandes temores.




Donde la única agua que fluye
es un amargo valle de lágrimas.
Y las campanas navideñas que allí suenan
son campanas que replican perdición.



Bien, esta noche gracias a Dios son ellos
en lugar de serlo tú.



Y no habrá nieve en África esta Navidad,
el mejor regalo que tendrán este año es la vida.
Donde nada jamás crece,
ni la lluvia ni los ríos fluyen.
¿Saben ellos realmente que es la Navidad?



Ahí va para ti,
brinda por todo el mundo.
Ahí va por ellos,
bajo ese ardiente sol.
¿Saben ellos realmente que es la Navidad?


Alimenta al mundo.

Alimenta al mundo.
Déjenlos saber que es Navidad y alimenta el mundo.


Déjenlos saber que es Navidad y alimenta el mundo.


Déjenlos saber que es Navidad y alimenta el mundo.



Déjenlos saber que es Navidad y alimenta el mundo.


Déjenlos saber que es Navidad y alimenta el mundo.

Y después de un momento de reflexión y comprender la suerte que hemos tenido al nacer en un país desarrollado. Os deseo una feliz Noche Buena y un feliz día de Navidad. Disfrutar de vuestras familias, amigos, etc. y brindemos por todo el mundo. Y ojalá entre todos, consigamos arreglar el mundo.

FELIZ NAVIDAD

22 de diciembre de 2008

Personajes Míticos de la Navidad

Llega la Navidad y con ella los bombones, las gambas, las uvas, las pasas, los regalos, las postales, las reuniones familiares, las luces, la feria (ummm, con el algodón de azúcar), las cabalgatas, la lotería, los dulces, los árboles de navidad, los belenes.... y entre ellos aparecen de nuevo los personajes de la Navidad, como Papá Noel o los Reyes Magos, lástima que vengan solo una vez al año. Asi que todos a portarse bien, que luego nos traen carbón y nos quejamos.

Es época de mágia, es época de la Navidad y si creéis que solos entre tanta mágia se encuentran los Reyes Magos y Santa Claus, estáis muy equivocados...
Os presento algunos nuevos personajes navideños...

Carbonilla es un personaje de la mitología navideña. Supuestamente sería uno de los pajes de los Reyes Magos, encargado de vigilar a los niños durante todo el año para saber si han sido buenos o malos.
Carbonilla sería el encargado de decir a los Reyes, y con el paso de los años también a Santa Claus, qué niños merecían juguetes y cuáles no. Por eso, cada vez que un niño se portaba mal, los padres le advertían que en lugar de los Reyes o Santa Claus, le visitaría Carbonilla y que le traería carbón en lugar de sus juguetes.

Duendes navideños. Se dice que aparecen en las noches de Navidad cuando la estrella polar brilla en su máxima expresión, de la cual proceden. Los Duendes navideños son seres mágicos y bondadosos que visten trajes de colores, botas y gorritos con campanitas. Los hay jóvenes y ancianos, pero en su mayoría son ancianos. Una serie de luces multicolores que atraviesan el cielo nocturno de las latitudes avisan su llegada. Serían los encargados de elaborar los regalos (principalmente juguetes), que Santa Claus repartiría a los niños buenos y obedientes.



Olentzero es un personaje de la tradición navideña vasca. Es un carbonero mitológico que trae los regalos el día de Navidad en los hogares vascos. Actualmente está considerado como parte ineludible de las Navidades en todos los territorios de cultura vasca.
El Olentzero es un carbonero que se representa como un hombre grueso, desarrapado, manchado de carbón, de buen comer y borrachín. Su singular característica es que vive aislado de la sociedad dedicado a hacer carbón vegetal en el bosque gustándole comer y beber bien y cada invierno baja de las montañas a los pueblos.

Los Reyes Magos en España, Portugal y gran parte de Latinoamérica son los encargados de darles regalos a los niños el 6 de enero (Fiesta de la Epifanía). La tradición más difundida cuenta que vinieron de Oriente, en número de tres, y que iban guiándose por una estrella (conocida como la estrella de Belén) que les condujo hasta Belén. Allí buscaron al Niño Jesús recién nacido y le adoraron, ofreciéndole oro (representando su naturaleza real, como presente conferido a los reyes), incienso (que representa su naturaleza divina, empleado en el culto en los altares de Dios) y mirra (un compuesto embalsamador para los muertos, representando el sufrimiento y muerte futura de Jesús). Antes de llegar, encontraron al rey Herodes el Grande en la ciudad de Jerusalén, quien astutamente les conminó a que, de regreso, hablaran con él para darle noticia del sitio exacto donde se encontraba dicho niño; y, así, poder ir él también a adorarle. (En realidad, lo que quería era darle muerte, por eso ordenó la matanza de los inocentes).
La historia sigue contando cómo un ángel se apareció a los tres reyes magos y les advirtió del peligro que corría Jesús si ellos obedecían el deseo de Herodes. Así pues, no volvieron por el mismo sitio. Parece ser que, sólo por el hecho de que el relato evangélico indicara que trajeron tres dones (oro, incienso y mirra), se dio por sentado que eran tres los personajes que los traían. Aunque también en algún momento las distintas tradiciones han señalado que eran dos, cuatro, siete y hasta doce.


Santa Claus o Papá Noel en EE.UU y el Norte de Europa. Se ha convertido en el personaje central de la Navidad en todo el mundo. El mito actual cuenta que Santa Claus viviría en el Polo Norte junto a la Señora Claus y una gran cantidad de Duendes navideños, que le ayudan en la fabricación de los juguetes y otros regalos que le piden los niños a través de cartas.
Para poder transportar los regalos, Santa Claus los guardaría en un saco mágico de Santa Claus y los repartiría a las 00:00h del día 25 de diciembre, en un trineo mágico volador, tirado por renos navideños, liderados por Rodolfo (Rudolph), un reno que ilumina el camino con su nariz roja y brillante, siendo el último en agregarse a la historia.
Santa Claus podría entrar a los hogares de los niños, al transformarse en una especie de humo mágico; y así entrar por la chimenea u otro orificio de las casas; si éstas no disponen de una.
Para saber que niños merecen regalos, Santa Claus dispondría de un telescopio capaz de ver a todos los niños del mundo; además de la ayuda de otros seres mágicos que vigilarían el comportamiento de los niños. Así, si un niño se ha comportado mal, se dice que quien lo vendría visitar sería la carbonilla, y no Santa Claus; y como castigo carbonilla le regalaría a los niños solo carbón.


Tió de Nadal en Cataluña. El "tió" no era en principio otra cosa que el tronco que ardía en el hogar: el fuego a tierra. Un tronco que, al quemar, daba bienes tan preciosos como el calor y la luz, y que de forma simbólica ofrecía presentes a los de la casa: golosinas, barquillos, turrones. Aún podemos encontrar, en los pueblos, casas en las que el "tió" es un gran tronco que se pone a quemar en el fuego de tierra unos días antes de Navidad.
A partir de ésta forma más primitiva el "tió" evoluciona: El "tió" es un tronco, elegido por los niños, se deviene mágicamente un ser que se debe de alimentar y que vive durante unos días en la cocina de la casa, que da sus regalos en Navidad y que después se quema. Muy pronto, ésta característica de animal fantástico se refuerza a partir de añadir al tronco unas patas, aprovechar la forma de la madera para parecer la cara, ponerle una lengua y así encontramos el "tió" tal como lo conocemos ahora en la ciudad: un personaje que parece un animal que cada año llega unos días antes de Navidad, que reside en la cocina o, sobre todo, en el comedor, y al que es necesario alimentar —tradicionalmente algarrobas, pan seco y ahora más cosas—, y agua, para poder recibir sus obsequios. De una forma u otra el "tió" tiene un mismo objetivo: ofrecer regalos a los de la casa.
El "tió" se hace cagar, según la costumbre de cada casa, la noche de Navidad - Tradicionalmente después de la Misa del Gallo - o el mismo día de Navidad. Y por aquello de que los pequeños van a visitar otras casas de la familia. A diferencia de otras costumbres y personajes, el "tió" ha conservado todo un ritual tradicional. Hacer cagar al "tió" es una ceremonia doméstica o de pequeña comunidad (escuela, grupo de amigos), que consiste en el canto de una o más canciones características para acabar finalmente golpeando el tronco con fuerza.

El Niño Jesús o Niño Dios en Colombia y Venezuela. Es el encargado de traer los regalos el día de Navidad. ¡Claro, porque a Papá Noel no le daba tiempo!
Y con esto me despido.
Felices fiestas para todos

19 de diciembre de 2008

El ojo

Cierto día dijo el Ojo:
- Más allá de estos valles veo una montaña envuelta en azul velo de niebla ¿No es hermosa?

El Oído oyó esto, y tras escuchar atentamente otro rato, dijo:
- Pero ¿donde está esa montaña? No la oigo.

Luego, la Mano exclamó y dijo:
- En vano trato de sentirla o tocarla; no encuentro ninguna montaña.

Y la Nariz gritó:
- No hay ninguna montaña por aquí; no la huelo.

Luego el Ojo se volvió hacia el otro lado, y los demás sentidos empezaron a murmurar de la extraña alucinación del Ojo.

Y decían entre si:
- ¡Algo debe de andar mal en el Ojo!


Cuando alguien no piensa ni siente lo mismo que nosotros, o es capaz de contarnos experiencias que nosotros no hemos vivido... le tachamos de loco o mentiroso.
¿Por qué caemos en el error de creer como ciertas nuestras experiencias, mientras que a las de los demás, las ponemos en juicio?
¿Por qué creer que todos sentimos lo mismo y de la misma manera?
¿Por qué ser tan incrédulos si nada ganamos con ello?



Feliz fin de semana

14 de diciembre de 2008

La fábula del Águila

El águila, es el ave que posee la mayor longevidad de su especie.
Llega a vivir 70 años. Pero para llegar a esa edad, a los 40 años de vida tiene que tomar una seria decisión.
A los 40 años, sus uñas curvas y flexibles, no consiguen agarrar a las presas de las que se alimenta. Su pico alargado y puntiagudo, también se curva apuntando contra el pecho. Sus alas, están envejecidas y pesadas y sus plumas gruesas. ¡Volar es ahora muy difícil!
Entonces el águila, tiene sólo dos alternativas: morir o... enfrentar un doloroso proceso de renovación que durará 150 días.

Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y refugiarse en un nido, próximo a una pared donde no necesite volar.
Entonces, apenas encuentra ese lugar, el águila comienza a golpear con su pico la pared, hasta conseguir arrancárselo.
Apenas lo arranca, debe esperar a que nazca el nuevo pico con el cual después, va a arrancar sus viejas uñas.
Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, prosigue arrancando sus viejas plumas.
Y después de cinco meses, sale victorioso para su famoso vuelo de renovación y de revivir, y entonces dispone... de 30 años más.

Si estás cansado, tómate un tiempo y renuévate.
Para reanudar un vuelo victorioso es necesario desprenderse de ciertas ataduras, costumbres o tradiciones del pasado. Solamente libres del peso del pasado, podremos aprovechar el valioso resultado de una... renovación.



Necesitamos de vez en cuando, darnos un respiro, abandonar las cosas del pasado que ya no sean útiles y seguir volando.

¡Saludos a todos! Sigan volando...

12 de diciembre de 2008

Gracias Rosquilleta. Gracias Fugaz.

Premio I love your blog

Bueno, ya va siendo hora de que reparta el premio de Rosquilleta, que por supuesto no se me había olvidado. ¡Muchas gracias Rosquilleta por el detallazo! Me hizo muchísima ilusión.
Supongo que pronto nos veremos y ya nos contarás que tal tu vida en Palma. Y como dices tú, te mando un cálido abrazo! ¡Muchos besos y gracias!

Bueno, como se acercaba la Navidad, decidí esperar un poquito para repartirlo y seguir con la cadena. Y por supuesto, para agradecérselo.
Tengo que elegir a seis personas. Así son las normas, así que he tenido que decidir.
Y los premiados son...


Mialuaf: Blog con bellos y profundos textos acompañados de unas imágenes geniales. Seguro que os gustará. Enhorabuena Mía!
Diosaoasis: Ahora sí amiga, sin reenvios. Blogs llenos de dulzura, poemas y cuentos. Espero volverte a leer pronto. Enhorabuena!
Natacha: Como dice ella en su presentanción "Me gustan las cosas que me tocan el corazón". Así es su blog, lleno de sentimientos y de pensamientos. Enhorabuena Natacha!
Zorro: Aunque lleva un tiempo sin escribir. Nos encantaba leer su blog, por sus curiosas historias y en definitiva por narrar el mundo desde sus ojos. Enhorabuena Zorro!
Ivana: Blog con textos muy variados, como la vida misma. Cuentos, reflexiones, canciones... Segura de que os va a hacer reflexionar y ver con otros ojos. Simplemente genial. Enhorabuena! Curiosa nuestra manera de conocernos... Gracias Nerina.
Osa Mimosa: Ahora que por fin se ha decidido. Le mando con cariño este premio. Sigue escribiendo que me gusta leerte. Enhorabuena!

Y ya están los seis....¡Enhorabuena a todos los premiados!
Reglas y condiciones del premio:
• Hacer constar las reglas.
• Enumerar seis cosas sin importancia que nos hagan felices. Para que el post no sea muy largo resumo. Son cosas sin importancia, así que excluyo a mi gente... El algodón de azúcar, las navidades, el despertar de los días festivos y lo que supone no tener que madrugar, el viento sobre mi cara y mirar las estrellas.
• Elegir seis personas que continúen con el desafío.
• Avisarles con un comentario en su blog.

Premio Proximidade

Y bueno, todavía tengo otra sorpresa. Y esta vez de mi amiga Fugaz, que se acordo de todos sus lectores. Muchas gracias Fugaz, un detalle precioso.
Premio Proximidade que consiste en escribir este texto que leéis, además de colgar la foto del premio.Y repartirlo entre ocho blogs.
Rosquilleta: No es un reenvio ni por quedar bien, que conste. Me mola tu blog, es más, fue el primer blog que leí y seguí. Un saludo y enhorabuena.
Deva: Hace poquito que leo tu blog, pero me gusta. Me hacen pensar las cosas que escribes. Enhorabuena por el premio y por tu blog.
Elfa Mágica: Un rinconcito precioso, con mucha mágia. Me gusta como cuenta las aventuras de una elfa. Saludos!
Lulu: Un blog muy personal, sin duda. Me gusta leerte. Enhorabuena por el premio!
Liebre: Otro premio para Liebre, aunque ya no escribe. Espero que pronto recupere las ganas y la inspiración, y vuelva a hacernos sonreir con su fauna métrica, fotos de campamentos, etc.
Fire: Precioso blog. Es a lo que aspiro que se convierta un día mi blog... aunque supongo que tendre que aprender un poquito más de informática. Además, me gustan sus textos, las canciones, las fotografias... Mucho trabajo, así que enhorabuena por el blog y por este premio! Saludos!
Trazando caminos: Es una de mis favoritos. Cada mes se elige un tema del que hablar y los distintos autores van escribiendo post. Tengo mis favoritos, claro está. Es un blog muy interesante. Su idea me gusto. Así que quería premiarles a todos por todo su esfuerzo.
Nerina: Otro premio para mi amiga. Disfruto leyendote.
¡Enhorabuena a todos! No tenéis porque seguir la cadena y mucho menos agradecérmelo. Es vuestro porque os lo merecéis.
Un besazo y feliz día.

5 de diciembre de 2008

El triple filtro de Sócrates

En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso por su sabiduría y por el gran respeto que profesaba a todos.

Un día un conocido se encontró con el gran filósofo y le dijo:

- ¿Sabes lo que escuché acerca de tu amigo?

- Espera un minuto-replicó Sócrates-antes de decirme nada quisiera que pasaras un pequeño examen. Yo lo llamo el examen del triple filtro.

- ¿Triple filtro?

- Correcto- continuó Sócrates-antes de que me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea filtrar tres veces lo que vas a decir. Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro.

- El primer filtro es la verdad. ¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?

- No-dijo el hombre,-realmente solo escuché sobre eso y...

- Bien-dijo Sócrates-Entonces realmente no sabes si es cierto o no.

- Ahora permíteme aplicar el segundo filtro, el filtro de la bondad. ¿Es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?

- No, por el contrario...

- Entonces, deseas decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto.

- Pero podría querer escucharlo porque queda un filtro: el filtro de la utilidad. ¿Me servirá de algo saber lo que vas a decirme de mi amigo?

- No, la verdad que no.

- Bien- concluyó Sócrates. Si lo que deseas decirme no es cierto, ni bueno, e incluso no es útil... ¿para qué querría saberlo?

Tres son los principios, tres son las virtudes y también son tres los filtros.

¡Cuántos problemas nos evitaríamos si todos pusiésemos en práctica estos tres filtros!

Y es que si lo que vas a decir no es ni cierto, ni bueno ni útil es mejor quedarse callado.


Os deseo un feliz fin de semana.
Gracias, una vez más, por vuestros comentarios.

2 de diciembre de 2008

La mariposa azul

Esta historia me la contó una vez mi abuelo. Quizás no con las mismas palabras, ni con los mismos personajes, pero lo bonito de estas historias es el significado y no sus detalles. Espero que les guste.

Había un viudo que vivía con sus dos hijas, curiosas e inteligentes.
Las niñas siempre hacían muchas preguntas. Él sabía responder algunas, otras no...
Como pretendía ofrecerles la mejor educación, mandó a las niñas de vacaciones con un sabio que vivía en lo alto de una colina.

El sabio siempre respondía a las preguntas sin la menor vacilación.

Impacientes con el sabio, las niñas decidieron inventar una pregunta que él no sabría responder.

Una de ellas apareció con una hermosa mariposa azul que utilizaría para engañar al sabio.
- ¿Qué vas a hacer?, preguntó la hermana.

- Voy a esconder la mariposa en mis manos y voy a preguntar al sabio si está viva o muerta. Si él dijese que está muerta, abriré mis manos y la dejaré volar. Si dice que está viva, la apretaré y la aplastaré. Y así, cualquiera que sea su respuesta, será una respuesta equivocada.
Las dos niñas fueron entonces al encuentro del sabio, que estaba meditando.
- Tengo aquí una mariposa azul, dijo una de las hermanas. Dígame, ¿está viva o está muerta?
Muy calmadamente, el sabio sonrió y respondió:
- Depende de ti... Ella está en tus manos.

Así es nuestra vida, nuestro presente y nuestro futuro.
No debemos culpar a nadie cuando algo falle. Somos nosotros los responsables por aquello que conquistamos (o no conquistamos).
Nuestra vida está en nuestras manos, como la mariposa azul.
Nos toca a nosotros escoger que hace con ella.

¡Saludos a todos!

27 de noviembre de 2008

Como nace un paradigma

-Y si...¿lo hacemos así?.
- No, así no.
-Pero ¿por qué? Tiene más sentido hacerlo de esta manera, es más fácil.
-¡Qué no! Así no.
-¡Uy! Pero ¿por qué?
- No lo sé, el año pasado lo hicimos de esta otra forma.
-Ya, pero es más largo y más complicado.
-Bueno, da igual. Si se hizo así el año pasado será por algo...

Días más tarde nos explicaron que había distintas formas de solucionar el problema.
La maestra se extrañó, porque dijo que todos los años los alumnos solucionaban ese problema de la misma manera...

Un grupo de científicos colocó cinco monos en una jaula, en el centro de la misma colocaron una escalera y, sobre ella, un montón de plátanos.
Cuando un mono subía la escalera para agarrar las bananas, los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que quedaban en el suelo.


Después de algún tiempo, cuando un mono iba a subir la escalera, los otros no paraban de golpearle.

Pasado algún tiempo más, ningún mono subía la escalera, a pesar de la tentación de los plátanos.(no son tontos....). Entonces, los científicos sustituyeron uno de los monos.

La primera cosa que hizo fue subir la escalera, siendo rápidamente bajado por los otros monos, quienes le dieron una tremenda paliza. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo ya no subió más la escalera (aunque nunca supo porque le pegaban).

Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo. El primer sustituto participó con entusiasmo de la paliza al novato. Un tercero fue cambiado, y se repitió el hecho, lo volvieron a golpear. El cuarto y, finalmente, el último de los veteranos fue sustituido.

Los científicos quedaron, entonces, con un grupo de cinco monos que, aún cuando nunca recibieron un baño de agua fría, continuaban golpeando a aquel que intentase llegar a las bananas.

Si fuese posible preguntar a algunos de ellos por qué le pegaban a quien intentase subir la escalera, con certeza la respuesta sería:

-No sé, las cosas ¡siempre se han hecho así, aquí!


Solo hay dos cosas infinitas en el mundo: el universo y la estupidez humana. Y del Universo no estoy seguro."
Albert Einstein
Saludos a todos.
Os deseo un feliz fin de semana.

23 de noviembre de 2008

¿Por qué la gente grita?

Leyendo el blog de Dieguillo y su día de gritos. Me pregunté ¿por qué gritamos?... Y me acordé entonces de este cuento.

Debía de ser tan pequeña, que no tengo el recuerdo de sí lo leí o me lo contaron... Lo tenía dentro y yo ilusa sin saberlo. Espero que lo disfruten.


Un día un viejo sabio preguntó a sus seguidores lo siguiente:
- ¿Por qué la gente se grita cuando están enfadados?

Los hombres pensaron unos momentos:

- Porque perdemos la calma - dijo uno - por eso gritamos.

- Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? - preguntó el sabio - ¿No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enfadado?

Los hombres dieron algunas respuestas pero ninguna de ellas satisfacía al sabio.

Finalmente él explicó:

- Cuando dos personas están enfadadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Cuanto más enfadados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.

Luego el sabio preguntó:

- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran? Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente, ¿por qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña.

El sabio continuó:

- Cuando se enamoran más aún, ¿qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman.



Luego dijo:

- Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, llegará un día en que la distancia sea tanta que no encontrarán más el camino de regreso.



Saludos a todos.
Gracias por todas las visitas y comentarios que he tenido esta semana.

19 de noviembre de 2008

Gracias Diosaoasis

Premio al Esfuerzo Personal

Como caido del cielo, es este premio. No me lo esperaba en absoluto.

Cuando abri este blog, se trataba solo de un proyecto para mis futuros alumnos, no sabía si funcionaría o no, ni siquiera sabía si alguien me leería y mucho menos si la gente comentaría.
Gracias a el conocí gente con mis mismas inquietudes, aprendí nuevas historias, leí la vida de otros...
Y resulto que las historias gustaron, que la gente comentaba, que las visitas empezaron a subir... Yo que nunca he cruzado el charco y mis palabras lo han hecho...y ahora un premio. Desde luego es más de lo que yo esperaba.

Gracias Diosaoasis, ha sido toda una sorpresa. No es su valor, sino lo que significa. Que alguien haya pensando en este blog para darle un premio. No se que pensaría mi abuelo de todo esto... desde luego más que mio, este premio es suyo. Sin sus cuentos y sus historietas, este blog no sería posible... Otro tal vez, pero este no.



Gracias de nuevo, nos seguimos leyendo:
http://cuentodiosa.blogspot.com/
http://poemati.blogspot.com/

Anexo la información que debo pasar:
1.-Publicar una reseña con el enlace correspondiente a la persona que lo ha concedido.
2.-Poner las reglas en el blog.
3.-Compartir cinco valores importantes y cinco que no lo son, bajo mi punto de vista.
4.-Elegir a seis personas o más.
5.-Avisar a los galardonados dejando un comentario en su blog.


Y los premiados son:
Diosaoasis: Te reenvío el premio, no se si funciona así, pero en las normas no pone nada. Por tanta dulzura que desprendes en tus poemas y cuentos. Por toda tu dedicación a tus blogs, que si ya es complicado tener uno, no me imagino que sería teniendo tres. Aun así, sacas tiempo para pasearte por otros blogs y dejar siempre un dulce comentario. No se que verán los demás, pero yo veo esfuerzo, dedicación y constancia. Así que enhorabuena por tu segundo premio. Nos seguimos leyendo.

http://poemati.blogspot.com/
http://cuentodiosa.blogspot.com/
http://arteennuestrasmanos.blogspot.com/

Danichi: El joven Leopardo, porque es capaz de expresar sentimientos con palabras y por su manera de contar las cosas que le suceden. Leyendo su blog le descubres a él. Enhorabuena Danichi! Creo que con el cambio de plantilla, el premio quedará muy bien.
http://www.danichi-story.blogspot.com/

El Periscopio Indiscreto: Cuatro compañeros de clase que un día decidieron juntarse y crear un blog. Sumerge en su blog lleno de información y de noticias. Pocos blogs de noticias he visto yo tan interesantes. Enhorabuena camaradas!!
http://elperiscopioindiscreto.blogspot.com/

Nerina Thomas: Si hablados de lucha, superación, esfuerzo personal, es imposible amiga que este premio no vaya para tu blog. Por todo lo que dices, por todo lo que cuentas, por todo lo que eres. Enhorabuena Nerina.
http://nerinathomas.blogspot.com/

Mirloniger: Un blog auténtico, lleva su marca. Unos nos expresamos con palabras y otros solo con imágenes les sobra, así es Mirloniger. Enhorabuena por tu blog tan creativo!
http://mirloniger2.blogspot.com/

Fugaz: Blog bello por fuera y por dentro. Siempre con nuevas historias, narraciones, pensamientos sorprendentes. Déjate llevar por su música, por sus imágenes, por sus palabras… Enhorabuena Fugaz! Espero que a pesar de tener ya muchos premios, este también te haga ilusión.
http://fugazyeterna.blogspot.com/

Dieguillo: Y por último y no menos importante, a otro joven, a Halcón. Por su manera de expresarse. Blog irónico, crítico y sincero. A veces divertido, a veces pensativo, a veces dulce, a veces crítico… Su blog es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar (o leer en este caso). Enhorabuena!!
http://dieguillo-blog.blogspot.com/

18 de noviembre de 2008

20 de Noviembre- Día de la Infancia

Recuerdos
Te acuerdas de...aquel tiempo, cuando las decisiones importantes se tomaban mediante un práctico... 'Pito-pito gorgorito... donde vas tu tan bonito?...A la era verdadera... pim pom fuera!?

Se podían detener las cosas cuando se complicaban con un simple: ¡No ha valido! o ¡Mare! (¡Casa!)

Los errores se arreglaban diciendo simplemente...'¡Empezamos otra vez!'

El peor castigo y condena era que te hicieran escribir 100 veces: No debo... no hablaré...

Tener mucho dinero, solo significaba poder comprarte un helado... o una bolsa de chucherías a la salida del cole...

Hacer una montaña de arena, podía mantenernos felizmente ocupados durante toda una tarde...

Para salvar a todos los amigos... bastaba con un grito de: ¡Por mi, por todos mis compañeros y por mi primero!...

Siempre descubrías tus más ocultas habilidades, a causa de un: ¿A que no haces esto?

No había nada más prohibido que jugar con fuego...

¡TONTO EL ÚLTIMO! Era lo único que nos hacía correr como locos... hasta que sentíamos que el corazón se nos salía del pecho...

El 'poli y ladrón' era solo un juego para el recreo, y por supuesto era mucho más divertido ser ladrón que policía...

Los globos de agua... eran la más moderna, poderosa y eficiente arma que jamás se había inventado...

La mayor desilusión... era solo haber sido elegidos últimos para el equipo del cole...

Nunca faltaban los caramelos que tiraban los reyes en Navidad, ni el dinero que nos dejaba el ratoncito Pérez bajo la almohada...

¡GUERRA! solo significaba arrojarse tizas y bolas de papel durante las horas libres en clase...

Los helados y la leche con galletas constituían el grupo de los alimentos básicos y esenciales..

Quitarte las ruedas pequeñas a la bici significaba un gran paso en tu vida....

El mayor negocio del siglo era conseguir cambiar los diez cromos repetidos por el que hacia tanto tiempo que buscabas..

Hacer cabañas con ramas cuando íbamos de excursión al campo nos entretenía durante horas... hasta que venían a avisarnos de que teníamos que marchar y llorabamos desconsolados...

Todos te admiraban si lograbas cruzar la comba mientras saltabas...

Era un gran tesoro si encontrabas trozos de escayola o tiza en los cubos de basura y poder dibujar en el suelo y jugar...

Sentarnos frente al televisor... a las 5 en punto con los ojos desencajados y ver 'Barrio Sésamo'

Creerte superman o supergirl...y ponerte el 'babi' del cole a modo de capa mientras subidos en cualquier escalón deseabas con todas tus fuerzas poder volar como ellos...

Todas estas simples cosas... nos hacían felices, no necesitábamos nada más.... un balón, una comba y dos amigos con los que hacer el ganso durante todo el día...


SI PODEIS RECORDAR LA MAYORÍA DE ESTAS COSAS
Y HE CONSEGUIDO QUE SONRIAIS,
ENTONCES SIGNIFICA QUE HABEIS TENIDO UNA INFANCIA FELIZ...
Y QUE TODAVÍA OS QUEDA DENTRO ALGO DEL NIÑO QUE ERAMOS,
NO HACE TANTO TIEMPO...
NUNCA PERDAIS AL NIÑO QUE LLEVAMOS DENTRO
PORQUE DA SENTIDO A NUESTRA VIDA


Saludos al niño que llevas dentro...

11 de noviembre de 2008

El optimista y el pesimista

Bueno cuando crees que ya ningún niño te puede sorprender. Siempre llega alguno, con algún comentario con alguna idea descabellada y te hace reir a carcajadas.

Como un Sábado más, estaba hablando con algunos de mis troperos de mi grupo Scout. De repente se me planta delante uno de los troperos. Me interrumpe y me dice:

- ¡¡Eva, he descubierto como ser más alto!!
(Claro, ni él ni yo podemos presumir de altura desde luego...)
-Dime, dime que eso me interesa...
- Pues he descubierto que peinándome el pelo hacía arriba mido unos centímetros más... (mientras tanto, él se peina hacía arriba y me demuestra que es cierto lo que dice midiéndose en la pared...)

Yo me troncho de risa y él, él por supuesto que también...

Reírse de uno mismo, tomarse las cosas con sentido del humor, siendo optimistas. Creo que es lo mejor que se puede hacer. Este chico del que os hablo podía haber cogído otro camino y sin embargo, eligió el mejor, reírse de sí mismo y no dejar que se borre su sonrisa.

Y hablando de optimistas... Me viene a la cabeza este cuento:

Érase una vez dos niños, uno optimista y otro pesimista.
En casa, cada uno disponia de su propio cuarto de juegos.

El pesimista lo tenía todo lleno de juguetes que le habían regalado sus familiares y amigos con motivo de su cumpleaños o como regalo de Navidad.
Ahora bien, el niño siempre los recibía con lágrimas, pues nunca le regalaban lo qué el más quería: un tambor.
Tal era su obsesión por conseguir un tambor que era incapaz de contentarse con otros juguetes, por muy bonitos y divertidos que fuesen. Eso explica por qué todos los regalos estaban tirados por el suelo, completamente abandonados por su dueño.

El pequeño optimista no era tan afortunado, sus padres no tenían dinero para comprarle regalos. Lo único que tenía en su cuarto era un triste montoncito de estiércol de la granja y un tenedor.

Una tarde, como tantas otras, los padres se asomaron a los cuartos de recreo de sus hijos para verles jugar. Como de costumbre, el pequeño pesimista estaba lloriqueando porque no lograba encontrar un tambor entre su enorme montaña de juguetes.

En el cuarto del pequeño optimista el panorama era bien distinto. Al asomarse vieron a un niño risueño y feliz escarbando animadamente entre el estiércol con el tenedor. Mientras removía la pestilente masa, se decía en voz alta, con ojos llenos de emoción:

-Si tenemos estiércol en la granja, es porque hay un caballito cerca...

La misma situación y diferente manera de afrontarla.
¿Y tú lector?¿Qué te consideras, optimista o pesimista?

6 de noviembre de 2008

Manual para subir montañas

Después de leer el post de Rosquilleta, me vino a la mente este magnífico manual de Paulo Coelho, que hace una excelente comparación entre como subir una montaña y como conseguir uno sus propias metas.
Si aprendes a subir montañas, aprenderás a conseguir tus metas.

Escoge la montaña que deseas subir.
No te dejes llevar por los comentarios de los demás que dicen "esa es más bonita", o "aquella es más fácil". Vas a gastar mucha energía y entusiasmo en lograr tu objetivo, y por lo tanto eres tú el único responsable y debes estar seguro de lo que haces.

Has de saber llegar hasta delante de ella.
Muchas veces, vemos la montaña de lejos, hermosa, interesante, llena de desafíos. Pero cuando intentamos acercarnos, ¿qué ocurre? Que está rodeada de carreteras, que entre tú y tu meta se interponen bosques, que lo que parece claro en el mapa es difícil en la vida real. Por ello, prueba por todos los caminos, todos los senderos, hasta que por fin un día te encuentres frente a la cima que pretendes alcanzar.


Aprende de quien ya caminó por allí.
Por más que te consideres único, siempre habrá alguien que tuvo ese mismo sueño antes y acabó dejando marcas que te pueden facilitar la caminata: lugares donde colocar la cuerda, senderos, ramas quebradas para facilitar la marcha. La caminata es tuya y la responsabilidad también, pero no olvides que la experiencia ajena ayuda mucho.

Los peligros, vistos de cerca, son vencibles.
Cuando empieces a subir la montaña de tus sueños, presta atención a lo que te rodea. Hay despeñaderos, claro. Hay hendiduras casi imperceptibles. Hay piedras tan pulidas por las tormentas que se vuelven resbaladizas como el hielo. Pero si sabes dónde pones el pie, te darás cuenta de los peligros y sabrás evitarlos.

El paisaje cambia, así que aprovéchalo.
Claro que es necesario tener un objetivo fijado: llegar a lo alto.
Pero a medida que se va subiendo, se pueden ver más cosas, y no cuesta nada detenerse de vez en cuando y disfrutar un poco del panorama alrededor. A cada metro conquistado, puedes ver un poco más lejos; aprovecha eso para descubrir cosas de las que hasta ahora no te habías dado cuenta.

Respeta tu cuerpo.
Sólo consigue subir una montaña aquel que presta a su cuerpo la atención que merece.
Tú tienes todo el tiempo que te da la vida, así que, al caminar, no te exijas más de lo que puedas dar. Si vas demasiado deprisa, te cansarás y abandonarás a la mitad. Si lo haces demasiado despacio, caerá la noche y estarás perdido. Aprovecha el paisaje, disfruta del agua fresca de los manantiales y de los frutos que la naturaleza generosamente te ofrece, pero sigue caminando.

Respeta tu alma.
No te repitas todo el rato "voy a conseguirlo". Tu alma ya lo sabe.
Lo que ella necesita es usar la larga caminata para poder crecer, extenderse por el horizonte, alcanzar el cielo. De nada sirve una obsesión para la búsqueda de un objetivo, y además termina por echar a perder el placer de la escalada. Pero atención: tampoco te repitas "es más difícil de lo que pensaba", pues eso te hará perder la fuerza interior.

Prepárate para caminar un kilómetro más.
El recorrido hasta la cima de la montaña es siempre mayor de lo que pensabas.
No te engañes, ha de llegar el momento en que aquello que parecía cercano está aún muy lejos. Pero como estás dispuesto a llegar lejos, eso no llega a ser un problema.

Alégrate cuando llegues a la cumbre.
Llora, da palmas, grita a los cuatro vientos que lo has conseguido, deja que el viento allí arriba(porque allí en la cima siempre sopla el viento) purifique tu mente, refresque tus pies sudados y cansados, abra los ojos, limpia el polvo de tu corazón.
Piensa que lo que antes era apenas un sueño, una visión lejana, es ahora parte de tu vida. Lo has conseguido.

Haz una promesa.
Aprovecha que has descubierto una fuerza que ni siquiera conocías, y dite a ti mismo que a partir de ahora, y durante el resto de tus días, la vas a utilizar. Y, si es posible, promete también descubrir otra montaña y parte hacia una nueva aventura.

Cuenta tu historia.
Sí, cuenta tu historia. Ofrece tu ejemplo. Di a todos que es posible, y así otras personas sentirán el valor para enfrentarse a sus propias montañas.

Y creo que falta una, la que leí en el post de Rosquilleta.

Sube sin miedo...

"Sólo una cosa vuelve un sueño imposible...el miedo a fracasar"

Saludos a todos.

4 de noviembre de 2008

Los tres monjes


Incluso en los peores días, no te olvides de sonreir.

Había una vez, en la antigua China, tres monjes budistas que viajaban de pueblo en pueblo dentro de su territorio ayudando a la gente a encontrar su iluminación.

Tenían su propio método. Todo lo que hacían era llegar a cada ciudad, a cada villa, y dirigirse a la plaza central donde seguramente funcionaba el mercado. Simplemente se paraban entre la gente y empezaban a reír a carcajadas.

La gente que pasaba los miraba extrañada, pero ellos igualmente reían y reían. Muchas veces alguien preguntaba: ¿De qué se ríen?. Los monjes se quedaban un pequeño rato en silencio... se miraban entre ellos y luego, señalando al que preguntaba y apuntándolo, retomaban su carcacajada.

Y sucedía siempre el mismo fenómeno: la gente del pueblo, que se empezaba a reunir alrededor de los tres para verlos reír, terminaba contagiándose de sus carcajadas y tornaban a reír tímidamente al principio y desaforadamente al final.

Cuentan que al rato de reír , todo el pueblo olvidaba que estaba en el mercado, olvidaba que había venido a comprar y el pueblo entero reía y reía y nada tenía la envergadura suficiente para poder entristecer esa tarde.
Cuando el sol se escondía, la gente riendo volvía a sus casas; pero ya no eran los mismos, se habían iluminado.

Entonces, los tres monjes tomaban su atado de ropa y partían hacia el próximo pueblo.

La fama de los monjes corría por toda China. Algunas poblaciones, cuando se enteraban de la visita de los monjes, se reunían desde la noche anterior en el mercado para esperarlos.Y sucedió un día que, entrando en una ciudad, repentinamente uno de los monjes murió.

Ahora vamos a ver a los dos que quedan decían algunos, vamos a ver si todavía les quedan ganas de reír...Ese día más y más gente se juntó en la plaza para disfrutar la tristeza de los monjes que reían, o para acompañarlos en el dolor que seguramente iban a sentir.

¡Qué sorpresa fue llegar a la plaza y encontrar a los dos monjes, al lado del cuerpo muerto de su compañero... riendo a carcajadas! Señalaban al muerto, se miraban entre sí y seguían riendo.

-El dolor los ha enloquecido-dijeron los pobladores.
-Reír por reír está bien, pero esto es demasiado, hay aquí un hombre muerto, no hay razón para reír.

Los monjes, que reían, dijeron entre carcajadas:
-Ustedes no entienden... él ganó...él ganó..., y siguieron riendo.


La gente del pueblo se miraba, nadie entendía.

Los monjes continuaron diciendo con risa contenida:
-Viniendo hacia aquí hicimos una apuesta... sobre quién moriría primero... Mi compañero y yo decíamos que era mi turno... porque soy mucho mayor que ellos dos, pero él... él decía que él... iba a ser el elegido... y ganó ¿entienden?... él ganó...
Y una nueva andanada de carcajadas los invadió.

-Definitivamente han enloquecido-dijeron todos.
-Debemos ocuparnos nosotros del funeral, estos dos están perdidos.

Así, algunos se acercaron a levantar el cuerpo para lavarlo y perfumarlo antes de quemarlo en la pira funeraria como era la costumbre en esos tiempos y en ese lugar.

-¡No lo toquen!- gritaron los monjes sin parar de reír.
-No lo toquen... tenemos una carta de él... él quería que en cuanto muriera hicieran la pira y lo quemaran así... tal como está... tenemos todo escrito... y él ganó... él ganó.

Los monjes reían solos entre la consternación general.

El alcalde del pueblo tomó la nota, confirmó el último deseo del muerto e hizo los arreglos para cumplirlo. Todos los habitantes trajeron ramas y troncos para levantar la pira mientras los monjes los veían ir y venir y se reían de ellos.

Cuando la hoguera estuvo lista, entre todos levantaron del suelo el cuerpo sin vida del monje y lo alzaron hasta el tope de la montaña de ramas reunidas en la plaza. El alcalde dijo una o dos palabras que nadie escuchó y encendió el fuego.

Algunos pocos lagrimeaban en silencio, los monjes se desternillaban de la risa.

Y de pronto, algo extraño sucedió...

Del cuerpo que se quemaba salió una estela de luz amarilla en dirección al cielo y explotó en el aire con un ruido ensordecedor. Después, otros cometas luminosos llenaron de luz el cuerpo que se quemaba, bombas de estruendo hacían subir los destellos hasta el cielo y la pira se transformó en un increíble espectáculo de luces que subían y giraban y cambiaban de colores y de sonidos espectaculares que acompañaban cada destello.

Y los dos monjes aplaudían y reían y gritaban:
-¡Bravo...Bravo...!


Y entonces sucedió.

Primero los niños, luego los jóvenes y después los ancianos, empezaron a reír y a aplaudir.

El resto del pueblo quiso resistir y chistar a los que reían, pero al poco tiempo todos reían a carcajadas. El pueblo, una vez más, se había iluminado.

Por alguna razón desconocida, el monje que reía sabía que su fin se acercaba y, antes de morir, escondió entre sus ropas montones de fuegos artificiales para que explotaran en la pira, su última jugada, una burla a la muerte y al dolor, la última enseñanza del maestro budista:


La vida no finaliza, la vida sólo nace una y otra vez.
Y el pueblo iluminado... reía y reía.


29 de octubre de 2008

La leyenda de Jack O- Lantern

Se acerca el día de Todos los Santos. En España la tradición hace que no se celebre con alegría, porque es el día en que todos nos acordamos de nuestros familiares fallecidos y les llevamos flores a su tumba. Así que para muchos es un día triste.

Pero desde hace ya algunos años y cada vez más, se ha puesto de moda celebrar la noche de Halloween (como se hace en otros países). Mucho más alegre y donde los niños se lo pasan bomba.
Y hoy actualizo con una leyenda del origen de Halloween.

La historia proviene de la vieja Irlanda.
Cuenta la leyenda que Jack era un hombre sombrío, de corazón oscuro y malas intenciones.
Tan malo era que llegó a hacer tratos con el diablo en los que le hizo jurar que nunca intentaría robarle el alma, que nunca la aceptaría y menos aún se la reclamaría.
Cuando la muerte llamó a la puerta de Jack, se le planteó un grave problema: le cerraron las puertas del cielo debido a su terrible historial de maldades cometidas en vida; pero tampoco le aceptaron en el infierno ya que el mismísimo maligno le había prometido no aceptar su alma.
El diablo le entregó un carbón encendido para que se alumbrara en su viaje de vuelta a la Tierra.
Jack talló un nabo e introdujo el carbón encendido en su interior a modo de linterna. Desde entonce su espíritu vaga por todo el orbe, buscando un lugar donde poder descansar en paz.

Cuando los emigrantes irlandeses llegaron a Estados Unidos y vieron la abundancia de calabazas anaranjadas en su nuevo país, sustituyeron el nabo por la calabaza.

La gente creía que en la noche de Halloween( palabra que procede de All Hallow´s Eve, víspera de todos los santos), fantasmas y espíritus aparecerían para llevarles con ellos a su mundo infernal, y se disfrazaban para asustarles y espantarles. Además acostumbraban a dejarles comida y otros presentes en la puerta para contentarles y que no destrozaran sus hogares. La tradición del "trick or treat" (truco o trato) se implantó de tal forma en América que se sigue haciendo hoy en día.
FELIZ HALLOWEEN!!

26 de octubre de 2008

¿Cómo crecer?

Un rey fue hasta su jardín y descubrió que sus árboles, arbustos y flores se estaban muriendo.

El Roble le dijo que se moría porque no podía ser tan alto como el Pino.Volviéndose al Pino, lo halló caído porque no podía dar uvas como la Vid. Y la Vid se moría porque no podía florecer como la Rosa. La Rosa lloraba porque no podía ser alta y sólida como el Roble.
Entonces encontró una planta, una Fresia, floreciendo y más fresca que nunca.

El rey preguntó:
-¿Cómo es que creces saludable en medio de este jardín mustio y sombrío?

-No lo sé. Quizás sea porque siempre supuse que cuando me plantaste, querías fresias. Si hubieras querido un Roble o una Rosa, los habrías plantado.

En aquel momento me dije:
"Intentaré ser Fresia de la mejor manera que pueda".

"Ahora es tu turno. Estás aquí para contribuir con tu fragancia.
Simplemente mirate a tí mismo. No hay posibilidad de que seas otra persona.
Puedes disfrutarlo y florecer regado con tu propio amor por tí, o puedes marchitarte en tu propia condena"...

Jorge Bucay
Crece de la mejor manera que puedas.
Sin envidias, sin recelos...
Recuerda que casa persona es única. Y tú también lo eres.

22 de octubre de 2008

El puente

No hace mucho tiempo, dos hermanos que vivían en granjas adyacentes cayeron en un conflicto. Este fue el primer problema serio que tenían en 40 años de cultivar juntos hombro a hombro, compartiendo maquinaria e intercambiando cosechas y bienes en forma continua.
Comenzó con un pequeño malentendido y fue creciendo hasta que explotó en un intercambio de palabras amargas seguido de semanas de silencio.

Una mañana alguien llamó a la puerta de Luis.
Al abrir la puerta, encontró a un hombre con herramientas de carpintero.
-Estoy buscando trabajo por unos días- dijo el extraño. Quizás usted requiera algunas pequeñas reparaciones aquí en su granja y yo pueda ser de ayuda en eso.
-Sí -dijo el mayor de los hermanos. Tengo un trabajo para usted. Mire al otro lado del arroyo, en aquella granja vive mi vecino, bueno, de hecho es mi hermano menor.
La semana pasada había una hermosa pradera entre nosotros pero él desvío el cauce del arroyo para que quedara entre nosotros. Él pudo haber hecho esto para enfurecerme, pero le voy a hacer una mejor.
¿Ve usted aquella pila de desechos de madera junto al granero? Quiero que construya una cerca de dos metros de alto, no quiero verlo nunca más.

El carpintero le dijo:
-Creo que comprendo la situación.

El hermano mayor le ayudó al carpintero a reunir todos los materiales y dejó la granja por el resto del día para ir por provisiones al pueblo.

Cerca del ocaso, cuando el granjero regresó, el carpintero justo había terminado su trabajo.
El granjero quedó con los ojos completamente abiertos, su quijada cayó.
No había ninguna cerca de dos metros. En su lugar había un puente que unía las dos granjas a través del arroyo. Era una fina pieza de arte, con todo y pasamanos.

En ese momento, su vecino, su hermano menor, vino desde su granja y abrazando a su hermano mayor le dijo:
-Eres un gran tipo, mira que construir este hermoso puente después de lo que he hecho y dicho.

Estaban en su reconciliación los dos hermanos, cuando vieron que el carpintero tomaba sus herramientas.
-¡No, espera!. Quédate unos cuantos días, tengo muchos proyectos para ti -le dijo el hermano mayor al carpintero.

-Me gustaría quedarme -dijo el carpintero. Pero tengo muchos puentes por construir.

Recuerda esta historia. Y la próxima vez, antes de construir una barrera, construye un puente. Debemos aprender a perdonar.



19 de octubre de 2008

El hombre de la oreja verde

Un día, en el expreso de Soria a Monteverde,
vi que subía un hombre con una oreja verde.
No era ya un hombre joven, sino más bien maduro,
todo menos su oreja, que era de un verde puro.

Cambié pronto de asiento y me puse a su lado
para estudiar el caso de cerca y con cuidado.
Le pregunté: Esa oreja que tiene usted, señor,
¿Cómo es de color verde si ya es usted mayor?
Puede llamarme viejo -me dijo con un guiño-.
Esa oreja me queda de los tiempos de niño.

Es una oreja joven que sabe interpretar
voces que los mayores no llegan a escuchar:
oigo la voz del árbol, de la piedra en el suelo,
del arroyo, del pájaro, de la nube en el cielo.
Y comprendo a los niños cuando hablan de esas cosas
que en la oreja madura resultan misteriosas...
Todo eso me contó el hombre con una oreja verde
un día, en el expreso de Soria a Monteverde.

Y después de un Sábado más, rodeada de lobatos y troperos, me di cuenta al llegar a casa que mi oreja se volvió verde. ¿No es maravilloso?

12 de octubre de 2008

Pelea entre dos lobos

Este cuento lo escuche hace años en boca de mi abuelo. En su día no lo entendí y se me olvidó, pero gracias a San Google he podido recuperarlo; y ahora no solo lo entiendo sino que me parece maravilloso. Hoy me apetece compartirlo con vosotros.

Un Viejo Cacique de una tribu estaba teniendo una charla acerca de la vida con sus nietos.
Les dijo:
-Una gran pelea está ocurriendo en mi interior y es entre dos lobos.

Uno de los lobos representa la maldad, el temor, la ira, la envidia, el dolor, el rencor,la avaricia, la arrogancia, la culpa, el resentimiento, la inferioridad, la mentira, el orgullo, la competencia, la superioridad y la egolatría.
El otro la bondad, la alegría, la paz, el amor, la esperanza, la serenidad, la humildad, la dulzura, la generosidad, la benevolencia, la amistad, la empatía, la verdad, la compasión y la fe.

Esta misma pelea está ocurriendo dentro de ustedes, y dentro de todos los seres de la tierra.

Lo pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó a su abuelo:
-Abuelo, dime: ¿Cuál de los lobos ganará?

Y el viejo cacique respondió simplemente...
- El que alimentes...




Fíjate amigo...
¿A cuál de los dos lobos estás alimentando hoy?

5 de octubre de 2008

El buscador

Después de leer el post de Danichi sobre las personas buscadoras, es compresible que me venga a la cabeza el cuento del buscador, uno de los más conocidos de Jorge Bucay.

Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como buscador...
Un buscador es alguien que busca; no necesariamente es alguien que encuentra.
Tampoco es alguien que sabe lo que está buscando. Es simplemente para quien su vida es una búsqueda.
Un día el buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir. Él había aprendido a hacer caso riguroso a esas sensaciones que venían de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió.
Después de dos días de marcha por los polvorientos caminos divisó Kammir, a lo lejos. Un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó la atención. Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadoras. La rodeaba por completo una especie de valla pequeña de madera lustrada… Una portezuela de bronce lo invitaba a entrar.
De pronto sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de descansar por un momento en ese lugar.
El buscador traspaso el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas como al azar, entre los árboles.

Dejó que sus ojos eran los de un buscador, quizá por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción …

Abedul Tare, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días.

Se sobrecogió un poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra. Era una lápida, sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar…
Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado, también tenía una inscripción, se acercó a leerla. Decía:

Yamir Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas.

El buscador se sintió terriblemente conmocionado.
Este hermoso lugar, era un cementerio y cada piedra una tumba.
Una por una, empezó a leer las lápidas.
Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto, pero lo que lo contactó con el espanto, fue comprobar que, el que más tiempo había vivido, apenas sobrepasaba 11 años.
Embargado por un dolor terrible, se sentó y se puso a llorar.

El cuidador del cementerio pasaba por ahí y se acercó, lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si lloraba por algún familiar.
- No ningún familiar – dijo el buscador - ¿Qué pasa con este pueblo?, ¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad? ¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar? ¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que lo ha obligado a construir un cementerio de chicos?.

El anciano sonrió y dijo:
-Puede usted serenarse, no hay tal maldición, lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre. Le contaré: "cuando un joven cumple 15 años, sus padres le regalan una libreta, como esta que tengo aquí, colgando del cuello, y es tradición entre nosotros que, a partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abre la libreta y anota en ella:

A la izquierda qué fue lo disfrutado.
A la derecha, cuanto tiempo duró ese gozo.

Conoció a su novia y se enamoró de ella. ¿Cuánto tiempo duró esa pasión enorme y el placer de conocerla?…¿Una semana?, dos?, ¿tres semanas y media?…
Y después… la emoción del primer beso, ¿cuánto duró?, ¿El minuto y medio del beso?, ¿Dos días?, ¿Una semana? …
¿y el embarazo o el nacimiento del primer hijo?
¿y el casamiento de los amigos…?,
¿y el viaje más deseado…?
¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano…?
¿Cuánto duró el disfrutar de estas situaciones?… ¿horas?, ¿días?…

Así vamos anotando en la libreta cada momento que disfrutamos...cada momento.

Cuando alguien se muere,
es nuestra costumbre
abrir su libreta
y sumar el tiempo de lo disfrutado
para escribirlo sobre su tumba.
Porque ese es, para nosotros, el único y verdadero TIEMPO VIVIDO".




Sin ir más lejos, el otro quede con los amigos de siempre. No celebrábamos nada, ni era un día importante, simplemente quedamos para salir. Me fijé que mi amigo, últimamente se llevaba la cámara de fotos a todos lados. Cuando le pregunté para que se la llevaba, él me contestó "Cada momento es único y no se va a volver a repetir".
Vivimos mucho tiempo pero disfrutamos muy poco, y como dice este cuento, ese es el único y verdadero tiempo vivido, el que importa de verdad. Esos momentos que años más tarde, nos sigue sacando una sonrisa al recordarlos.
Quizás unos lleven libreta y otros lleven la cámara de fotos. Sea como sea, disfruta de cada momento, porque es cierto, cada momento es único y solo tú decides como vivirlo.

1 de octubre de 2008

Los tres sabios

Hoy, en un descanso, estaba hablando con una compañera sobre una antigua maestra. A mi compañera le parecía una mala maestra, que no escuchaba a sus alumnos y que siempre iba a su "bola".
Yo, sin embargo, la recuerdo como una buena persona, que se preocupaba por los problemas de sus alumnos. Parece mentira, que hablando de la misma persona, se tengan tan distintos puntos de vista.
Ahora que lo pienso me viene a la mente el cuento de "Los Tres Sabios":

Había una vez tres sabios. Y eran muy sabios. Aunque los tres eran ciegos. Como no podían ver, se habían acostumbrado a conocer las cosas con solo tocarlas. Usaban de sus manos para darse cuenta del tamaño, de la calidad y de la calidez de cuanto se ponía a su alcance.

Sucedió que un circo llegó al pueblo donde vivían los tres sabios que eran ciegos. Entre las cosas maravillosas que llegaron con el circo, venía un gran elefante blanco. Y era tan extraordinario este animal que toda la gente no hacía más que hablar de él.

Los tres sabios que eran ciegos quisieron también ellos conocer al elefante. Se hicieron conducir hasta el lugar donde estaba y pidieron permiso para poder tocarlo. Como el animal era muy manso, no hubo ningún inconveniente para que lo hicieran.

El primero de los tres estiró sus manos y tocó a la bestia en la cabeza. Sintió bajo sus dedos las enormes orejas y luego los dos tremendos colmillos de marfil que sobresalían de la pequeña boca. Quedó tan admirado de lo que había conocido que inmediatamente fue a contarles a los otros dos lo que había aprendido. Les dijo:
- El elefante es como un tronco, cubierto a ambos lados por dos frazadas, y del cual salen dos grandes lanzas frías y duras.

Pero resulta que cuando le tocó el turno al segundo sabio, sus manos tocaron al animal en la panza. Trataron de rodear su cuerpo, pero éste era tan alto que no alcanzaba a abarcarlo con los dos brazos abiertos. Luego de mucho palpar, decidió también él contar lo que había aprendido. Les dijo:
- El elefante se parece a un tambor colocado sobre cuatro gruesas patas, y está forrado de cuero con pelo para afuera.

Entonces fue el tercer sabio, y agarró el animal justo por la cola. se colgó de ella y comenzó a hamacarse como hacen los chicos con una soga. Como esto le gustaba a la bestia, estuvo largo rato divirtiéndose en medio de la risa de todos. Cuando dejó el juego, comentaba lo que sabía.
También él dijo:
- Yo se muy bien lo que es un elefante. Es una cuerda fuerte y gruesa, que tiene un pincel en la punta. Sirve para hamacarse.

Resulta que cuando volvieron a casa y comenzaron a charlar entre ellos lo que habían descubierto sobre el elefante no se podían poner de acuerdo. Cada uno estaba plenamente seguro de lo que conocía. Y además tenía la certeza de que sólo había un elefante y de que los tres estaban hablando de lo mismo, pero lo que decían parecía imposible de concordar.
Tanto charlaron y discutieron que casi se pelearon.
Pero al fin de cuentas, como eran los tres muy sabios, decidieron hacerse ayudar, y fueron a preguntar a otro sabio que había tenido la oportunidad de ver al elefante con sus propios ojos.

Y entonces descubrieron que cada uno de ellos tenía razón. Una parte de la razón.
Pero que conocían del elefante solamente la parte que habían tocado.
Y le creyeron al que lo había visto y les hablaba del elefante entero.

Es cierto, mi maestra, parecía una persona que iba a su "bola" y no escuchaba a sus alumnos, a mí es lo que me pareció en un principio. Sin embargo, y después de muchas charlas y tutorías, conocí no a la maestra sino a la persona y mi visión de ella cambió totalmente.

Para conocer realmente a las personas, tenemos que conocer la parte entera. Nos precipitamos al juzgar a las personas. Y sí, es posible que tengamos parte de razón, pero solo es eso, una parte. En la mayoría de veces, no damos tiempo a que la otra persona nos muestre todo lo que es.

Así que la próxima vez, antes de emitir un juicio o de pensar que tú tienes la única y exclusiva verdad, piensa en este cuento.

22 de septiembre de 2008

El rey ciclotímico

Hoy me he levantado con el día un poco raro. Necesitaba buscar en mi memoria un cuento que me sirviera para un día como hoy. Lo encontré y me funcionó, ojalá os sirva a vosotros para días nublados, porque, aunque parezca mentira, todo pasa.

Había una vez un rey muy poderoso que reinaba un país muy lejano. Era un buen rey. Pero el monarca tenía un problema: era un rey con dos personalidades.

Había días en que se levantaba exultante, eufórico, feliz. Ya desde la mañana, esos días aparecían como maravillosos. Los jardines de su palacio le parecían más bellos. Sus sirvientes, por algún extraño fenómeno, eran amables y eficientes esas mañanas.

En el desayuno confirmaba que se fabricaban en su reino las mejores harinas y se cosechaban los mejores frutos. Esos eran días en que el rey rebajaba los impuestos, repartía riquezas, concedía favores y legislaba por la paz y por el bienestar de los ancianos. Durante esos días, el rey accedía a todos los pedidos de sus súbditos y amigos.

Sin embargo, había también otros días. Eran días negros. Desde la mañana se daba cuenta de que hubiera preferido dormir un rato más. Pero cuando lo notaba ya era tarde y el sueño lo había abandonado.

Por mucho esfuerzo que hacía, no podía comprender por qué sus sirvientes estaban de tan mal humor y ni siquiera lo atendían bien. El sol le molestaba aun más que las lluvias. La comida estaba tibia y el café demasiado frío. La idea de recibir gente en su despacho le aumentaba su dolor de cabeza.

Durante esos días, el rey pensaba en los compromisos contraidos en otros tiempos y se asustaba pensando en cómo cumplirlos. Esos eran los días en que el rey aumentaba los impuestos, incautaba tierras, apresaba opositores.

Temeroso del futuro y del presente, perseguido por los errores del pasado, en esos días legislaba contra su pueblo y su palabra más usada era NO. Consciente de los problemas que estos cambios de humor le ocasionaban, el rey llamó a todos los sabios, magos y asesores de su reino a una reunión.

—Señores –les dijo— todos ustedes saben acerca de mis variaciones de ánimo. Todos se han beneficiado de mis euforias y han padecido mis enojos. Pero el que más padece soy yo mismo, que cada día estoy deshaciendo lo que hice en otro tiempo, cuando veía las cosas de otra manera.
Necesito de ustedes, señores, que trabajéis juntos para conseguir el remedio, sea brebaje o conjuro que me impida ser tan absurdamente optimista como para no ver los hechos y tan ridículamente pesimista como para oprimir y dañar a los que quiero.


Los sabios aceptaron el reto y durante semanas trabajaron en el problema del rey. Sin embargo todas las alquimias, todos los hechizos y todas las hierbas no consiguieron encontrar la respuesta al asunto planteado. Entonces se presentaron ante el rey y le contaron su fracaso.
Esa noche el rey lloró.

A la mañana siguiente, un extraño visitante le pidió audiencia. Era un misterioso hombre de tez oscura y raída túnica que alguna vez había sido blanca.

—Majestad –dijo el hombre con una reverencia—, del lugar de donde vengo se habla de tus males y de tu dolor. He venido a traerte el remedio.

Y bajando la cabeza, acercó al rey una cajita de cuero. El rey, entre sorprendido y esperanzado, la abrió y buscó dentro de la caja. Lo único que había era un anillo plateado.

—Gracias –dijo el rey entusiasmado— ¿es un anillo mágico?

—Lo es –respondió el viajero—, pero su magia no actúa sólo por llevarlo en tu dedo...Todas las mañanas, apenas te levantes, deberás leer la inscripción que tiene el anillo. Y recordar esas palabras cada vez que veas el anillo en tu dedo.

El rey tomó el anillo y leyó en voz alta:
Debes saber que ESTO también pasará.

Recuerda que todo pasa. Ninguna cosa ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche, hay momentos de alegría y momentos de tristeza. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.

17 de septiembre de 2008

El cruce del río

En la vida siempre tenemos excepciones, cualquier regla las tiene.
Es difícil saber cuando una regla tenemos que saltarla o sacrificar algo para hacer algo que tú consideras que esta bien. Pero a veces, es necesario no cumplir las normas y dejarse un poco llevar por el corazón, porque sólo así, podrás distinguir entre lo que está bien y lo que está mal...
Pensando en ello, me viene a la mente una historia...

Había una vez dos monjes zen que caminaban por el bosque de regreso al monasterio. Cuando llegaron al río, vieron a una mujer que lloraba en cuclillas cerca de la orilla. Era joven y atractiva.
-¿Qué te sucede?- le preguntó el más anciano.
-Mi madre se muere. Está sola en casa, al otro lado del río, y yo no puedo cruzar. Lo intenté -siguió la joven-, pero la corriente me arrastra y no podré llegar nunca al otro lado sin ayuda... Pensé que no la volvería a ver con vida. Pero ahora... Ahora que habéis aparecido vosotros, alguno de los dos podrá ayudarme a cruzar...
-Ojalá pudiéramos -se lamentó el más joven-. Pero la única manera de ayudarte sería cargarte a través del río y nuestros votos de castidad nos impiden todo contacto con el sexo opuesto. Lo tenemos prohibido... Lo siento.
-Yo también lo siento- dijo la mujer. y siguió llorando. El monje más viejo se arrodilló, bajó la cabeza y dijo: Sube.
La mujer no podía creerlo, pero con rapidez tomó su hatillo de ropa y subió a horcajadas sobre el monje.
Con bastante dificultad, el monje cruzó el rió, seguido por el joven. Al llegar al otro lado, la mujer descendió y se acercó al anciano monje con intención de besar sus manos.
-Está bien, está bien -dijo el viejo retirando sus manos-, sigue tu camino.
La mujer se inclinó con gratitud y humildad, recogió sus ropas y corrió por el camino hacia el pueblo.
Los monjes, sin decir palabra, retomaron su marcha al monasterio. Aún les quedaban diez horas de caminata...
Poco antes de llegar, el joven le dijo al anciano:
-Maestro, vos sabéis mejor que yo de nuestro voto de abstinencia. No obstante, cargasteis sobre vuestros hombros a aquella mujer a través de todo lo ancho del río.
-Yo la llevé a través del río, es cierto. pero ¿qué te pasa a ti que todavía la cargas sobre tus hombros?